Es real que desde que inicio la Pandemia, han sido muy pocas las veces que hemos llegado a salir, por eso, ese día de aventura y fuera de casa fue uno de esos días maravillosos para toda la familia.
Sinceramente, yo ya llevaba días deseando salir de la rutina y de casa, y justo ese sábado en la mañana Alex nos dijo: “preparen todo nos vamos a Puebla”, yo sin titubear prepare todo en ese mismo momento.
Le dije a Elián, que iríamos a nadar y a ver a los leones, lo cual lo puso súper feliz, ya que, llevábamos días diciéndole que lo llevaríamos a ver a los animales.
Elián me ayudo en absolutamente todo, a escoger su ropa, a escoger que juguete llevar, a sacar su mochila, fue muy lindo ver como con la emoción preparaba sus cosas.
Ya en el camino hicimos una reservación para el Hotel, nos aseguramos que tuviera alberca, porque claro le prometimos a Elián que nadaríamos.
Y así fue, llegando a la recepción nos dijeron que, para ese día solo quedaba media hora (en ese preciso momento) para que nos pudiéramos meter a la alberca.
Ya saben por temas del Covid, y en seguida corrimos a cambiarnos y a meternos a la alberca.
No puedo describirles la cara y la felicidad de Elián de meterse al agua, estaba que no podía con la emoción.
Nos encanto el servicio de Hotel, estuvo increíble!
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// VISITA AL AFRICAM SAFARI “EL DÍA MÁS ESPERADO PARA ELIÁN”
Ese día nos levantamos a nadar muy temprano para aprovechar otro día de alberca, y después de almorzar nos dirigimos al Safari.
Llegando al Africam, todos estábamos muy contentos, y lo primero que vimos fueron a las jirafas, y de ahí, a los avestruces, las zebras, el rinoceronte y a los elefantes.
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Elián brincaba de un lado a otro para ver de cerca a los animales, el recorrido es un poco lento por la cantidad de carros, pero nunca paramos de la emoción de saber cuál animal seguiría.
Por fin, se le hizo a Elián ver a los leones, a los osos, a los alces, a las tortugas, los mandriles, claro había muchísimos más animales pero Elián era los que más deseaba ver.
Elián se puso un poco triste porque no encontramos a los kanguros, ni a los lémures y ya no quisimos seguir caminando, porque ya estaba muy cansado.
Elían se quedo con ganas de verlos, sobre todo a los “caca”, así les dice a los lémures, se supone que los lémures de cola anillada se les conoce como “Catta”, pero Elián le cambio el nombre.
Ame nuestro día de aventura, sin duda disfrutamos cada momento, yo me quedo con la cara de Elián cuando se metió a la alberca, fue lo mejor!
Espero disfrutarás esta nueva categoría de mi Blog, Estilo de Vida con Sinfonía de mamá, Bienvenida!
